SEAN LOCOS

                                                                                                                MI SEGUNDA CASA

La calle nuestro segundo hogar, quitando las horas de clase, nos pasábamos el resto en la calle, amigos, todos eran amigos, yo creo que no existían enemigos, aunque eso si, estaba el gordo, el gafotas, el torpe, el patoso, el idiota, el empollón y muchos mas que seguro irán saliendo.
El juego era algo natural y lógico, si pensamos que no había dinero, por lo general , los juguetes eran pura fantasía.
Con tacones viejos se jugaba a la raya, se tiraba el tacón y el que se acercaba mas a la raya ganaba los cromos que se jugaban.
Con chapas de gaseosas se jugaban partidos de fútbol entre cloaca y cloaca, o se hacían carreras en un circuito dibujado en el suelo con tizas y se daban golpecitos con los dedos.
Con bolas o canicas se jugaba a varios juegos, el cua, el 3 14 16, el palmo y sigo y algunos mas.
Jugabas con una bola chica de cristal o piedra y tenias una caja llena que eran de barro y servían para el intercambio, las rodillas y los pantalones eran los que mas sufrían, todo el día en el suelo con las bolas.
Cada juego nadie sabia porque pero tenia su época, cuando tocaba bolas no se jugaba a otra cosa, así como a las chapas, y en todos los demás lo mismo.
La baldufa (trombo) era algo sanguinario, jejeje, se quitaban las puntas originales redondas y se ponían en su lugar clavos afilados, metidos con caca de caballo, (que en aquellos años,rondaban en las calles, que cuando se secaba se endurecía como piedra, y el juego consistía en dibujar una redonda y al tirar la baldufa, tenia que empezar siempre dentro del circulo pero salir a fuera, si no lo conseguías tenias que dejar la baldufa en el centro y hasta que otro niño no te la sacara a golpes no podías seguir jugando. Eso si no te la partían con los golpes, con el consecuente lloro –a ver como le digo a mis padres que me la has roto-.
Sin juguetes teníamos juegos muy divertidos, el ídem que en algunos sitios se le llama el salto al burro, uno se achacaba y los demás teníamos que saltar por encima apoyando las manos, el caball fort, consistía en ponerse uno detrás de otro saliendo desde la pared y el otro equipo tenia que saltar encima y se decía “churro, media manga, mango entero, adivina que tengo en el puchero” y con la mano se indicaba el hombro la muñeca o el codo y así hasta que lo adivinaba. Dicho sea de paso la de piernas y muñecas que se rompían yo creo que los de nuestra generación se nos identifica por las huellas en nuestros cuerpos, quien no tiene una cicatriz que lo demuestra.
El pillar, tocar y parar, las cuatro esquinas, el bote, y tantos y tantos que seguro que la mayoria de vosotros no conoceis. Esta claro que hablo de lo que yo conocí, porque las chicas eran otra cosa en aquellos días.
Solo una mención especial al fútbol con pelota de trapos liados con cuerdas y la guerra de calles a base de piedras, razón no había ninguna solo por el echo de jugar a guerras.
Y en estos juegos participaban todos y digo bien todos, otra cosa es que se manifestara la condición de cada uno, al gordo se le llamaba gordo sin contemplaciones, al torpe nunca se le elegía por las buenas en ningún equipo y él lo sabia, al mimado se le fastidiaba para verlo llorar, y así con cada uno de nosotros.
Pero así nos forjamos como personas, duros, nobles, alegres, y sabiendo de antemano que el vivir no era nada fácil, y creo que mi generación somos por lo general gente autónoma y autosuficientes. La vida nos lo enseño así.

                                                                                                                   ACADEMIA MINERVA

 

Un día de clase, cuarenta y pico niños, de diversas edades mezclados,  en una habitación llena de pupitres muy característicos.
Mesa con caída y atada a un banco pequeño de madera, que te dejaba las posaderas acartonadas, y en el pupitre una tapa que se levantaba para dejar la cartera de cuero y en una esquina un tintero con una pluma medio roída.
Pocos libros, solo una enciclopedia rehusada por tus hermanos cientos de veces, una libreta de muelles, un lápiz stanled y una goma Milán (que buenas estaban, joer).
El espacio mínimo, justo para pasar entre pupitres encogiendo la barriga. Así salía el olor típico y característico. El levantarte, cuando entraba el “Señor profesor” el rezo de un “padre nuestro” y el canto del “cara al sol” diario y seguido de un seco y rígido ¡siéntensen!.
Seria lógico el desmadre por el poco espacio que existía, pero nunca se producía, la mano del maestro llegaba a todas partes, parecía dios, siempre estaba en todas partes y oia el vuelo de la mosca diaria, el silencio era la tónica.
Don Genaro, se hizo hacer una vara de dos metros, así podía puntualizar en la pizarra desde cualquier lugar de la clase, (clase que no creo que midiera mas de 25 metros cuadrados), una vara redonda que empezaba con un grosor de 7 centímetros y que acababa con solo uno. El invento se volvió muy pronto en contra de nosotros, a base de dar golpes en la cabeza de quien se despistaba, se quedo en una medida de unos 30 centímetros y los golpecitos en la cabeza que hacían “cling”, al principio, se transformaron en golpetazos que hacían “clong”.
Pero aun con todo esto, nadie puede negar que lo pasabamos de muerte, reiamos mucho y jugábamos con desenfreno... al salir de clase claro.  Soy zurdo sabeis, y claro me costaba estar con la mano atada en la mesa, la izquierda claro y si alguna vez me escapaba de esta atadura y escribia con la izquierda, con una pluma de tinta. podéis probar y veréis lo que sucede, la propia mano arrastraba la tinta, vaya follón se me liaba con la maldita pluma asi tengo manchones por todos los escritos de aquella época.
La hora del patio... ¡ja!, no teníamos patio, ¿que era eso?. Las horas interminables se hacían sin descanso, solo para comer y seguir a la tarde, y ni siquiera sabíamos que pudiera existir otra forma. Pero hay, cuando salías, después de jugar con las cosas mas inverosímiles...  aun suena en mi cabeza los gritos de las madres desde las ventanas…
”Manoliiiiiiiiiitttttttttttoooooooooooo, aaaa  cooooooooooommeeeeeeeeeer” –
“ya voyyyyyyyyyyyyyy” –
“Quuuueeeeeeeeee subaaaaaaaaaaas he diiiiiiiiiicho” –
“Peeeeepiiiiitooooooooooooooo”
“disimula y has como si no la oyeras” –
“Peeeepiiiitoooo queeeee seeee queeeeee meeeee oyes”-
“Jope, me tengo que ir”.
Dulces años de niñez que nos forjaron en ser personas honestas y felices, que la lucha diaria nos hizo fuertes y duros para enfrentar la vida.
Y olvidarnos de estas pequeñeces es hacernos adultos tristes y problemáticos. Amo la felicidad y debo luchar día a día para sentirla y vivirla. 

                                                                         AQUELLOS AÑOS 

Creo que los que habitamos en esta ciudad virtual y somos mas o menos de la misma generación y por lo tanto los recuerdos son algo parecidos y los que no, tendrán conocimiento de ello estando a nuestro lado.
No me gusta ser demasiado nostálgico, pero olvidar el tiempo pasado es olvidar en cierta forma de donde venimos y quienes somos.
Yo nací en Barcelona capital, el tiempo justo al final de la posguerra el año 49.
Y comparar aquella época con la actual es un trabajo arto difícil, pero no es mi intención ser demasiado duro en ello, solo recordar que es lo que me interesa la parte jocosa y divertida .
Recordar las clases en el colegio el olor característico que no se descifrar pero que me quedo en mi recuerdo, una mezcla de pipi mezclado con goma de borrar “Milan”(que por cierto nos comíamos) y sudor infantil, la higiene en aquellos tiempos no estaba demasiada trabajada, no por marranos, sino por medios.
El juego en las calles, sin automóviles, las bolas, los tacones, las chapas, los cromos, la pelota de trapo casera…
Y el juego con las niñas, descubriendo a base de juegos el sexo contrario.
Los médicos, a papas y mamas, y las tonterías de levantar faldas y palmaditas en el culo.
Y las fantasías sobre todo del mismo tema, nadie nos contaba nada, pero lo sabíamos todo, bueno a nuestra manera, que si los niños no vienen de Paris nacen de la barriga de la mama y salen por el hombligo… ¿pero como se ha metido allí adentro?.. no se quizás que ha comido alguna medicina que lo fabrica, quizás… pero ¿porque los tíos no podemos? Porque no tenemos tetas para darle de comer… ahhhhhh, claro.
Mi primer descubrimiento fué con una vecina, el ver nuestras intimidades y asombrarnos de cada uno porque a ella le faltaba la colita que yo tenia, por donde hacia pipi, y porque yo si tenia colita, solo fue un mirar para saber y nunca mas supe… de ella claro, porque fue la que me enseño lo que era sentir algo de placer junto a una mujer.
Que tiempos aquellos en que la inocencia podía con nuestra imaginación y la falta de conocimientos nos llenaba de historias inventadas para suplirla.
En fin solo es una pequeña pincelada

como caso excepcional este video

MI VENGANZA 

- ¿Si, digame?
- Buenos días, ¿Es Usted es el titular de la línea?
- Sí, soy yo.
- ¿Me puede decir su nombre por favor?
- Eliseo.
- Señor Eliseo, le llamo de Telefónica para ofrecerle una promoción consistente en la instalación Imagenio en su casa, en donde usted tendrá derecho a...
- Disculpe disculpe que la interrumpa señorita, pero, exactamente ¿quien es usted?
- Mi nombre es Silvia Martos, de Telefónica y estamos llamando...
- Silvia, discúlpeme, pero para nuestra seguridad me gustaría comprobar algunos datos antes de continuar la conversación, ¿le importa?
- No tengo problema señor Eliseo.
-¿Desde que teléfono me llama? En la pantallita del mío solo pone "Número Privado"
- Le llamo desde el 1004.
- ¿Para qué departamento de Telefónica trabaja?
- Tele marketing Activo
- ¿Me podría dar su número de trabajadora de Telefónica?
- Señor Elieseo, disculpe, pero creo que no es necesaria toda esa información...
- Entonces lamentablemente tendré que colgar, porque no tengo la seguridad de hablar con una trabajadora de Telefónica.
- Pero yo le puedo garantizar...
- Vamos a ver Silvia, cada vez que yo llamo a Telefónica, antes de poder comenzar cualquier trámite, estoy obligado a dar mis datos a toda una legión de empleados...!
- Está bien Señor Eliseo, mi numero es el 34591212
- Un momento no se retire Silvia, mientras lo verifico,... (Dos minutos)
- Un momento por favor, toda la gente en casa están ocupados.... (Cinco minutos)
- ¿Señor Eliseo?
- Un momento por favor, toda la gente en casa están ocupados....
- Pero...Hola Señor Eliseo...!
- Sí Silvia, gracias por la espera, el sistema está un poco lento hoy... ¿Cual era el asunto de su llamada?
- Lo llamo de Telefónica, estamos llamando para ofrecerle nuestra promoción "Línea Imagenio", en la que usted tiene derecho al uso de otra línea con muy bajo costo. ¿Usted estaría interesado Eliseo?
- Silvia, le voy a comunicar con mi compañero, que es de la sección de adquisición de productos técnicos de la casa; por favor, no se retire. (Coloco el auricular del teléfono delante de un cassette y pongo el CD de Caribe Mix 2007 con la repetición activada. Sabía que algún día, esa droga de música me sería útil. Después de sonar el CD entero, atiendo otra vez el teléfono con tono diferente de voz):
- Disculpe por la espera, me puede decir su teléfono pues en el mío solo aparece "NUMERO PRIVADO".
- 1004
- Gracias, ¿Con quien estoy hablando?
- Con Silvia
- ¿Silvia que?
- Silvina Martos (ya demostrando cierta cabreo en la voz).
- ¿Cual es su número de trabajadora de Telefónica?
- 34591212 (mas cabreada todavía)
- Gracias por la información Silvia, ¿en que puedo ayudarla?
- La llamo de Telefónica, estamos llamando para ofrecerle nuestra promoción "Línea Imagenio", en la que usted tiene derecho a el a bajo coste. ¿Estaría interesado?
- Voy a ingresar su solicitud en nuestro programa de Nuevas Adquisiciones y dentro de algunos días nos contactamos con usted. ¿Puede anotar el numero de ingreso al programa por favor?... ¿hola?, ¿hola?
- TU...TU...TU...TU...  

EL NOVATO

 

Llevas una vida sencilla, tranquila, monótona, aburrida, sin objetivo final, sin meta que alcanzar.

Ya piensas que has hecho y dado todo lo que tenias de ti. Dejas pasar los días, contemplándolos uno a uno, sin esperar nada que pueda cambiarlo.
Sabes que lo que tienes es pura rutina, y falta todo lo parecido a una chispa de ilusión.
La rutina lleva al aburrimiento y el aburrimiento al malestar y así se inicia una cadena de malestar continuo, que se deriva en el día a día.

Por hacer algo nuevo buscas en un mundo virtual algo diferente.
Buscas algún lugar donde la gente se comunique, aunque sepas que casi todo puede ser mentira, aunque sepas que casi todo puede ser forzado, pero pruebas y buscas.

Entras en un sitio llamado “chatear” y ves un lugar llamado “sala de más de 50”, entras con un sobrenombre “sean catalán” se te ocurre porque ya en muchos sirios te han llamado así. La intención es no participar, solo curiosear y saber cómo funciona la historia.
Pero así que entras, un nick al parecer de mujer, te da la bienvenida.

Se hace llamar “nineta”, me sorprende que se dirija tan directamente a mí, ¿Cómo ha podido saber que entraba?, con lo discreto que yo venía, me ha descubierto.

Nineta: hola Sean

Jo ¿tanto se ve lo novato que soy?

Le contesto y es entonces cuando se me hace aquello que cuelga en los hombres un lio, solo hacen que pasar líneas de cosas que no puedo seguir.

Tatiana: no se que me dices
Pedrito: pues mañana, no lo se
Feotudo: HAY ALGUIENNNNNN QUE KIERA ABLAR?
Trompeta: tengo cam KIEN ME MIRA
23centimetros: busco mujer en Madrid
Sansa: hola pardillaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Pardilla. Hola sansaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Y así líneas y líneas sin enterarme de nada.
Sale otra vez:

Nineta: Sean sígueme.

Y aquí sí que me veo con el lio de mi vida. Seguirla ¿A dónde?
Sale un letrerito que dice:

Niñeta deja el chat
Niñeta entra en la sala de las tres mosqueteras

Empiezo a buscar y veo que hay un sitio que dice SALAS 
Apretó y busco hasta que veo la dichosa sala. "LAS TRES MOSQUETERAS"

Pulso ahí y me encuentro con tres personas, niñeta, otra mujer y un hombre llamado algo así como Ismaelo.
Aquí parece más tranquila la cosa y después de algunos comentarios de presentación típicos en los chats, de donde eres, cuántos años tienes, estas casado, casada, etc. Me parece ante mí una noche fantástica.

Me imagine que estaba sentado en la puerta de la calle, en un pueblo y comentando de la gente que pasaba por delante. Que al ser un chat, entraba y salía. Un ejercicio digno de cualquier investigación sociológica. Me reí mucho aquella noche, fue genial, hacía años que no me reía tanto, que dolor de abdominales de tanto reír.

Fue un buen comienzo, el inicio de una vida nueva, el inicio de una vivencia que me ha traído de nuevo la felicidad.

Ahora el Sean monótono, ha dejado de serlo, para volver a ser el Sean imaginativo y enamorado que siempre había sido. Gracias NINETA, alias LA MAMI.

LA CREACION
 

Al principio todo era oscuridad y Dios nuestro señor creó la luz.
Y Así le quedó todo iluminado, pero no había casi de nada y era todo muy aburrido.
Entonces se rascó la cabeza y se dijo a si mismo: Jolín qué muermo, voy a crear algo más gracioso.
Y así hizo las plantas vegetales y los hierbajos.
Pero todavía era soso el mundo y Dios se hartaba de echar siestas porque aún se aburría.
Ya está, pensó, haré los animales para que se meneen un poquito y me den algo de chou espectacular. E hizo lo bichos. Le salieron de todos los tamaños y colores, peludos, plumados, calvos, con patas y sin patas, con dientes y sin dientes, mansos y cabrones y de todo, así en general.
Luego, lo que pasó es que Dios muerto de sueño no sabía cómo repartirlos por el planeta, que era entonces un paraíso terrenal bastante apañado, y decidió lo siguiente: Los tiró a todos al mar oceánico. A los que nadaron los llamó pescados y cetáceos. A los que se cagaron de miedo y se liaron a nadar como locos hasta la orilla los llamó animales terrestres pulmonares. A los que se salieron del agua volando y se escondieron en lo árboles los llamó pájaros voladores. Y a los que se ahogaron los llamó cadáveres.
Pero aún así, Dios, el supremo creador del universo, se seguía aburriendo. Y por eso hizo al hombre.
El hombre estaba solo y se mataba a solitarios, se frotaba en los árboles como un oso y le salían ronchas en el aparato de hacer pipi. Fue así que le pidió a Dios que le hiciera una pareja como a lo demás bichos, que estaban todos ennoviados menos él. Dios se compadeció y le arrancó de cuajo una costilla.
Adán, que se llamaba el tío, se retorció como una raíz. Y si no, probad de arrancaros una costilla y veréis. Y con la costilla le fabricó una hembra que se llamó Evarista, pero la llamaban familiarmente Eva para que fuera más corto. Adán y Eva se hartaban de hacer eso que tanto nos gusta. Pero como todo lo repetido cansa, el Adán al cabo de dos años, ya se liaba con todas las monas y las ovejas y las marranas del paraíso, con lo cual la Eva le pidió la separación muy enfadada. Como no estaban casados no se pudieron separar y siguieron a lo suyo.
Pero al cabo del tiempo, el Dios todopoderoso, se volvió a aburrir, y se le ocurrió que para que no fuera todo tan fácil en el paraíso, se tenía que inventar algo para darle emoción. Entonces se sacó una ley que decía que todo lo que había en el paraíso se podía comér menos a la serpiente.
Y estando un día la Eva y el Adán tocándose las narices como siempre debajo de una higuera, apareció por entre las ramas una serpiente gorda, maja y hermosa que venía a ofrecerle una manzana guapísima golden para que la probaran. El Adán y la Eva que vieron aquello de una serpiente con una manzana en la boca, le atizaron un mamporro y se la hicieron al horno. Dios nuestro señor se dio cuenta de que le habían desobedecido y entonces mandó un angelote antidisturbios con porra de fuego y casco de pluma para que los expulsaran del paraíso terrenal y se fueran a tomar por donde amargan los pepinos...!!!
Y ahí se acabó la buena vida. La que hay ahora ya la conocéis vosotros.
Y no me quiero poner de pesado, pero así fue la cosa y por eso nos va como nos va.
Lo que no entiendo es porque echaron también a los animales.