Cuando comencé a realizar este trabajo quise “recoger” todas las semillas que pudieran ser utilizadas como brotes, cada vez me daba cuenta de que eran más y más y nunca me sentía satisfecho con el trabajo realizado, hasta que al final me dí cuenta de que este trabajo no es cosa de uno, sino de TODOS, lo expondré en esta página nuestra de Latapada2010 (hasta que elijamos nuevo nombre) que a su vez se llama latalega (tal como nos llamábamos antes de la separación).

¿Qué son los germinados?

Los germinados son uno de los pocos alimentos que ingerimos cuando aún están vivos, lo cual aumenta enormemente su valor nutricional. El contenido nutricional de las semillas germinadas es equiparable al de las frutas y verduras, pero las superan en cuanto a su riqueza enzimática y en clorofila, muy importante por su acción antianémica, revitalizante y antitóxica. Los germinados son únicos ya que están disponibles en cualquier época del año y en cualquier lugar del mundo. Todos los brotes de semillas no son comestibles, tales como las semillas de plantas que tienen hojas venenosas, las semillas de solanáceas (tomates, berenjenas, ruibarbo...),. Debemos escoger las semillas de plantas comestibles. La soja real (color amarillo de la soja) es tóxica por lo que no debe consumirse crudo.

Propiedades nutricionales

Las propiedades nutricionales de los germinados son altísimas, los germinados de soja o de guisantes, con un 27% de proteína son comparables al porcentaje de la carne, la leche y los huevos, pero sin el gran contenido en grasa, por ejemplo, en la soja germinada el contenido de vitamina A y carotenos se duplica en sólo 2 días, alcanza el 280% a las 54 horas y llega al 370% de su cantidad inicial en apenas 72.

Los germinados de cereales y algunas semillas como el trigo y las pipas de girasol, son ricos en grasas. Mientras la grasa de la harina y el germen de trigo se enrancian muy rápidamente, las grasas en los germinados duran semanas. El tan afamado aceite de germen de trigo es roto en fracciones de ácidos grasos esenciales de los cuales más de un 50% es Omega 6. Mientras que el aceite de girasol es la mejor fuente de ácidos omega 6, los germinados de girasol hacen esas grasas más digestivas y asimilables.

Propiedades terapéuticas

Los germinados son sobradamente conocidos porque ayudan a prevenir enfermedades.

  1. Favorecen los procesos de desintoxicación y depuración.

  2. Fortalecen el sistema inmune.

  3. Combaten la acción de los radicales libres.

  4. Estimulan la secreción del páncreas.

  5. Facilitan la digestión al activar los procesos de regeneración y desinflamación del aparato digestivo.

  6. Mejoran el funcionamiento intestinal y fortalecen la flora intestinal.

  7. Rebajan el índice de colesterol.

Favorecen en general el metabolismo por su acción reconstituyente.

Lo ideal es usarlos en todas las ensaladas, aunque también se pueden añadir a otros platos como revueltos, purés, sopas, guisos, potajes, salteados, guarniciones, bocadillos, etc., siempre procurando añadirlos al final del cocinado para que estén el mínimo tiempo al fuego. Son alimentos muy tiernos, incluso los germinados de legumbres y granos, y su sabor difiere según el tipo de que se trate (desde el sabor dulce de los germinados de trigo hasta el sabor algo picante de los germinados de rábano o mostaza).

Aminoácidos esenciales. Los germinados, especialmente los de legumbres, proporcionan al organismo proteínas completas que se transforman en los ocho aminoácidos esenciales. La falta de uno sólo puede favorecer la aparición de alergias, debilidad, mala digestión, deficiencias en la inmunidad o envejecimiento prematuro de las células.


Vitamina C. Los germinados de trigo, lentejas, soja, garbanzos y judías son excelentes fuentes de esta vitamina, una de las sustancias que más aumenta por efecto de la germinación. De hecho, la soja germinada incrementa su contenido en vitamina C hasta un 100% y los brotes de trigo lo aumentan en un 600% en sólo 5 días.

Betacarotenos (pro-vitamina A). El germinado de alfalfa, col y guisantes son excelentes fuentes de esta vitamina que el cuerpo absorbe y que es esencial para el crecimiento, el desarrollo, la buena vista y el aparato reproductor.


Vitamina B: la tiamina (B1), la riboflavina (B2) y la niacina (B3) son especialmente abundantes en los germinados de alfalfa, trigo, girasol, centeno y sésamo. Contribuyen al

buen funcionamiento del sistema nervioso.


Vitamina E. El trigo germinado llega a incrementar hasta tres veces su contenido de esta vitamina que actúa como antioxidante celular y que es un excelente protector del corazón y un buen tonificante.


Vitamina K. Se encuentra en abundancia en la alfalfa germinada. Posee propiedades coagulantes.


Clorofila. Las semillas germinadas que más clorofila sintetizan son las de trigo y las de alfalfa. Diversos autores consideran que es absorbido directamente por la sangre a través del sistema linfático. Una vez en el torrente sanguíneo activa el metabolismo celular, mejora la defensa, resistencia y capacidad regeneradora de las células así como su respiración, potencia los procesos naturales de curación, depura la sangre, frena las infecciones y equilibra la relación ácido-base en el organismo, entre otras propiedades.


Calcio. Los germinados de sésamo proporcionan más calcio que cualquier otro alimento vegetal. También son excelentes fuentes de este mineral los brotes de almendra, girasol, alfalfa y garbanzo.


Potasio. Se encuentra -incluso en cantidades que superan las de muchas frutas y hortalizas- en los brotes de almendras, sésamo, girasol, soja y judías.


Hierro. Alfalfa, fenogreco, lentejas, soja roja y soja verde germinados lo contienen en cantidades importantes.


Oligoelementos. En general los germinados contienen oligoelementos como el yodo, el zinc, el selenio, el silicio, el cromo y el cobalto.


Enzimas. Cuando se comen crudas las enzimas de las semillas germinadas -llamadas diastasas- facilitan la digestión de la fibra, las proteínas y las grasas.




Comienzo de recopilación, entre todos la agrandaremos:


ALFALFA: Contiene gran cantidad de todos los minerales, vitaminas y oligoelementos necesarios para mantener nuestros procesos vitales (vitaminas A, B, C, E y K, además de calcio, manganeso, azufre, cloro, fósforo, aluminio, magnesio, calcio, sodio, potasio, hierro, selenio y zinc y los aminoácidos más importantes). Es remineralizante y combate la fatiga y la debilidad y una excelente relación calcio/fósforo (muy importante en osteoporosis). También aporta gran cantidad de clorofila (si la pones al sol antes)


ALPISTE: Usado popularmente como reductor de lípidos o grasas en sangre, relaja y ablanda las partes inflamadas y es diurético. En Canarias además de aperitivo se considera gran remedio para los males de orina y piedra, riñón y vejiga, y refrescante para los calores; antiguamente con su harina se hacía pan. Indicado en hipercolesterolemia y prevención de la arteriosclerosis y en situaciones en las que se requiere un aumento de la diuresis, tales como afecciones genitourinarias (cistitis), hiperazotemia (= abundancia de sustancias nitrogenadas en la sangre), hiperuricemia, gota, hipertensión arterial, edemas, sobrepeso acompañado de retención de líquidos, gastritis y úlcera, sobre todo úlcera del estomago.


ARROZ INTEGRAL: Es rico en vitamina B, fósforo, potasio, magnesio, sodio, calcio y silicio. Ayuda a la adecuada conservación de huesos y dientes.


AZUKI: Facilita los procesos digestivos y favorece el desarrollo de la flora intestinal. Es utilizada en tratamientos de desintoxicación, gracias a su aporte en tiamina o vitamina B1. Protege el corazón y el sistema nervioso. Estimula el funcionamiento del riñón produciendo un buen efecto. Como toda legumbre, el azuki ayuda a regular la tasa de azúcar en sangre, siendo aconsejada en personas diabéticas. Es muy indicada durante el embarazo por su riqueza en minerales y oligoelementos. Relaja y estimula la producción de leche materna. Baja en grasas. Alto contenido en carbohidratos, fibra, hierro, fósforo y vitamina B1.


AVENA: Es la semilla germinada más recomendable en caso de trastornos nerviosos, depresiones y alteraciones del sueño. Contiene un alto contenido en silicio, necesario para el desarrollo de las estructuras musculares, cerebrales y nerviosas. También contiene vitaminas B y E, proteínas, carbohidratos, fibra y minerales.


BERRO: Se le considera muy adecuado para combatir los síntomas de la fatiga primaveral. Además de alcalinizar y depurar la sangre neutraliza el exceso de toxinas. También regula el metabolismo. Es rico en hierro, fósforo, manganeso, cobre, zinc, yodo, calcio y vitaminas A, B2, E y especialmente C.


CALABAZA: Proporciona gran cantidad de proteína, así como vitamina B y F, también fósforo, hierro y calcio. Son especialmente útiles para los problemas prostáticos y la parisitosis intestinal. Utilizar cuando el brote tenga medio centímetro, después el grano amarga, pero se puede comer el brote.


CAÑAMO: Es muy aconsejable para cuidar o prevenir las enfermedades cardiovasculares. Participan en el buen funcionamiento del sistema inmune y son un potente antioxidante, son ideales en caso de estreñimiento ya que tienen un altísimo porcentaje de fibra y son, a la vez, unas de las proteínas vegetales más digestivas, contiene todos los aminoácidos esenciales. Aporta vitaminas A, C, D, E y del grupo B. Entre los minerales destaca su aporte de Calcio, Fósforo y Hierro.

CEBOLLA: Los brotes de cebolla poseen altas dosis de agua, vitaminas, minerales, enzimas y elementos antioxidantes que estimulan los procesos digestivos y ayudan a regenerar la flora intestina.


CENTENO: Es un excelente fluidificante sanguíneo, que además flexibiliza los vasos y, por lo tanto, debe recomendarse en todos los casos de hiperviscosidad sanguínea, hipertensión, arteriosclerosis y enfermedades vasculares en general.


FENOGRECO: Contiene una sustancia, la fenogrekina, que interviene en la regulación de la secreción de insulina por el páncreas. También contiene galactomanano que ayuda a mejorar la respuesta a la glucosa en diabéticos y reduce los niveles de colesterol, por lo tanto es hipoglucemiante e hipolipemiante. Funciona como aperitivo, es decir, tomado al principio de las comidas abre el apetito. Como curiosidad, en la antigüedad las mujeres orientales, en lugar de perfumarse exteriormente, comían germinados de fenogreco para oler bien, ya que otorgan un especial olor al sudor. Es un limpiador sanguíneo y renal que se recomienda para levantar el ánimo decaído y para reforzar el organismo. Además estimula las funciones digestivas y hepáticas. Contiene abundante fósforo y hierro. No abusar de ella porque sus propiedades son demasiado ricos en dosis altas. Contiene vitaminas A, B, B2, B3, B5, D.


GARBANZOS: Germinados no producen gases durante la digestión. Son ricos en carbohidratos, fibra, calcio, proteínas, magnesio, potasio y vitaminas A y C.


GUISANTES: Proporcionan clorofila, proteínas, carbohidratos, fibra, vitamina A, hierro, potasio y magnesio. Germina también sin cáscara. Bajo en grasas. Alto contenido en fibra, magnesio, fósforo, hierro, cinc y vitamina B1.


HINOJO DULCE: Evita y ayuda a expulsar los gases intestinales, resulta beneficioso en los enfermos asmáticos, cardíacos (angina de pecho), hidropesía y edemas, dispepsia, catarros de la vejiga y enuresis, y para madres lactantes, a las que favorece la producción de leche y la hace más agradable para el bebé. Ricos en hierro, calcio, manganeso y vitaminas A y C.


LENTEJAS: En brotes retrasan el envejecimiento y son ricas en proteínas y vitamina C, baja en grasas. Alto contenido en fibra, hierro, cobre, zinc y vitamina B1.


LINO: Su composición media es: 23% proteínas, 40% aceite (75% de ácidos grasos poliinsaturado). 2% carbohidratos (glucosa y galactosa), 7% fibra y un 6% Mucílago, además posee vitamina E, yodo, y algunas enzimas útiles que ayudan a la digestión de los otros alimentos. También actúa sobre los estómagos ulcerados o enfermos como un excelente antiinflamatorio, refrescante y sobre todo protector contra el exceso de ácidos. A pesar de su riqueza en proteínas, el lino está indicado en los casos de trastornos del ácido úrico, al que neutraliza fácilmente. La semilla de lino puede usarse también como alimento para diabéticos por su escaso contenido en glúcidos y alto porcentaje en aceite y proteínas.


LOMBARDA: Rica en calcio y sodio, contiene hierro, manganeso y zinc, además de vitaminas A, B, B3 y C.


MAIZ: tiene un alto contenido en magnesio, necesario para conservar la tensión muscular especialmente en el tracto intestinal.


MOSTAZA: Rica en calcio, azufre, fósforo, potasio y hierro. Contiene vitaminas A, B1, B2 y C, proteínas y lípidos, es el germinado más picante. Adecuado para tratar trastornos digestivos como gastritis, enteritis, etc.


PIPAS DE GIRASOL: Ricas en proteínas, grasas insaturadas, vitaminas B y E, calcio, hierro, fósforo, potasio y magnesio.


PUERRO: El puerro es un diurético, rico en calcio y hierro.


RABANO: Útil para combatir digestiones pesadas y para calmar la tos. Contiene abundante clorofila. El rábano como la mostaza es un excelente antibacteriano que puede mezclarse con otras semillas para crear un ambiente mas protegido. Germina en 4 días.


RUCULA: Contiene hierro, magnesio, potasio (le confiere efecto diurético) Betacarotenos, vitamina C y triptófano, un aminoácido esencial que le confiere sus beneficios afrodisíacos y muy buena para la regulación del sueño y combatir el estres, pues ayuda a la liberación de serotonina.


SESAMO: Sus semillas son una buena fuente de fibra, proteínas, vitaminas B y E, magnesio, potasio, hierro, fósforo y calcio.


SOJA: Baja en grasas. Alto contenido en proteinas, fibra, calcio, magnesio, hierro, ácido fólico y vitamina B1.


SOJA VERDE: contiene proteínas que dan lugar al aminoácido metionina, de efecto relajante. También fortalece el sistema nervioso y contribuye a rebajar el exceso de colesterol. Sus semillas germinadas son ricas en vitaminas A, C, hierro y potasio.


TRIGO: El valor nutritivo de los cereales más completos. Proteínas, carbohidratos, calcio, cobre, hierro, sodio, zinc + vitamina B1, B2, B3, B5 y B9, magnesio, fósforo y vitaminas E. Previene infecciones, remineraliza, regenera las células y sirve para tratar trastornos nerviosos.


ZANAHORIA: Su sabor es muy amargo, puede mezclar con las variedades más neutral, como la alfalfa. Rico en minerales y vitaminas B, C, D y E.



ALIMENTOS O "TRUCOS" QUE NOS AYUDAN A MANTENERNOS MEJOR: 

 

ARROZ INTEGRAL

 

Remojar 1 hora en agua antes de utilizarlo, se pone más jugoso, y se suele utilizar tres medidas de agua por cada una de arroz integral.


DOLOR DE OIDOS

 

Se utiliza el jugo de la piña templado, una gota (una) en el oído.

GERMINADO
www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=632
 

Tenerla en remojo durante 24 horas, escurrir muy bien, y después taparlas en un bote, pero con el tapón perforado por varios sitios. Guardar en un sitio oscuro, y enjuagarla una vez al día en invierno y dos veces al día en verano. Con el frío tarda mucho más en germinar.

 

HOJAS DE COL

 

Si molesta la garganta, se coge hojas machacadas de col, se calientan un poco, se envuelven en un trapo y se envuelve con el mismo la garganta, por la mañana cuando despiertes estarás mucho mejor.



 KEFIR.-  www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=66

 


KUZU.- www.karlosnet.com/Arzak/kuzu.php

 

 
SINUSITIS

Una forma cómoda y fácil de aliviar el atasco que genera es coger dos trocitos de cebolla e introducírselo en la nariz, un trozo en cada agujero.

 

 

TOS

 

Se coge una patata ecológica se corta finamente, se pone una rodaja en un recipiente, se echa por encima una cucharadita de azúcar moreno, se vuelve a poner otra rodaja de patata, se vuelve a echar otra cucharadita de azúcar moreno, así unas cuantas, después se tapa y esto genera un liquido que una vez colado se puede tomar, esperar ocho o diez horas.