La revista Ritmo nació durante los sesentas, cuando la Nueva Ola comenzaba a proliferar en todas las radios de Chile.
 El contenido se asemeja a la definición de prensa rosa, más conocida en estos tiempos como “farándula”.
 Pero a diferencia de hoy, el mundo del espectáculo era más bien una fantasía,
 donde las jovencitas de calcetines largos se peinaban y maquillaban como las actrices de antaño.
 E intercambiaban autógrafos y fotografías de sus ídolos, de la talla del Pollito Fuentes.

 

directora de la revista, María Pilar Larraín, fue una destacada cantante y compositora, además de periodista.
La revista Ritmo tenía una mascota que siempre aparecía en el título. Un gato conocido como “Yo-Yo”,
con un parecido cercano al felino Félix. Pero este gatuno amigo tenía su club de fans propio


La revista contenía reportajes, breves, informaciones acerca de concursos y festivales de la canción,
 notas internacionales y póster a todo color. Además, consejos de belleza para resolver los típicos problemas adolescentes,
 como cuando sale un grano o si la nariz se ve grande.
También un ránking musical con los LP más vendidos y los más tocados en las radios.